La génesis de mi trabajo es una misteriosa necesidad por redescubrir mitos universales y personales a través de imágenes que puedan dar apertura al misterio. Influenciado por un rico tenebrismo barroco, es decir, yuxtaponiendo dramáticamente la luz con la sombra, surge una lucha entre lados muy oscuros y muy luminosos del ser humano, pues la luz, y todas sus cualidades simbólicas, son más poéticas cuando se contrastan con la oscuridad. Construyendo las pinturas a partir de un método de alternancia progresiva de capas de óleo, que contrastan pesados empastes de luces con delgados y profundos espacios de sombra, se manifiestan complejidades casi palpables. Mi objetivo es abrir un diálogo con el misterio e invitar al espectador a ser cautivado por lo inasequible y lo desconocido.